Estas galletas brownie con aroma de frambuesa son sorprendentes. Crujientes por fuera y blanditas por dentro. Si te gusta el chocolate éstas son las tuyas.
Tiene un par de dificultades. La primera, que no las puedes dejar en casa, estas son para llevarlas a la oficina, o a casa de unos amigos, porque si las dejas en casa, te las comerás todas. Y la segunda, que no puedes pasarte con el tiempo del horno porque pierden mucho si se hacen demasiado.
Por otro lado tienen muchos pros. Gustan a todos, sobre todo a los chocolateros, y son un regalo perfecto para llevar a una merienda o a un cumpleaños de niños. De verdad que son un vicio.