Cuando Mamá Caldillo prepara las clóchinas o mejillones como os indicamos aquí, la salsita resultante de la cocción es abundante, y está de auténtico rechupete, por lo que desaprovechar una sola gota, sería casi un pecado.
En casa servimos los mejillones en su plato a cada comensal, y la salsa se queda en el bol de servirlos, a disposición de todos. Como para tomar marisco el cubierto se compone de tenedor y cuchillo, ¿cómo hacer entonces para tomarse esa maravillosa salsita?
Pues fabricándose cada uno, en el momento, una original y estupenda cuchara como os detallo a continuación.
Tomamos la concha de uno de los mejillones, a ser posible que sea grandecita.
Por la parte estrecha de la misma y con el hueco hacia arriba, introducimos las dos púas centrales del tenedor por arriba y las dos de los extremos por debajo, empujando un poco hasta que quede perfectamente encajada y convertida en una eficaz y original cuchara para este plato.
Es más fácil verlo que explicarlo, así que os dejo una imagen del paso a paso para crear y utilizar la «cuchara».
Si os apetece hacer unos «mojetes» de pan (cosa altamente recomendable para el cuerpo y para el alma), también lo podréis hacer de forma muy cómoda. Trasladamos al bol el trocito de pan en la “cuchara marinera”, lo introducimos en el líquido sin permitir que se caiga y nos lo traemos bien empapado y con caldito, consiguiendo un bocado realmente exquisito.
Sirve también para “pescar” alguno de los mejillones que se desprenden de las conchas y están en la salsa.
Fácil, ¿verdad?. Pues cuando tengáis la oportunidad, lo probáis y me comentáis el resultado.
La elaboración de esta «cuchara marinera» nos la enseñó, hace ya mucho tiempo, Alejandro, hijo de unos buenos amigos valencianos, y ya es tradicional utilizarla en nuestra casa cuando nos deleitamos con esta maravilla gastronómica.
2 comentarios en “Cuchara marinera manufacturada”
Pero qué súper idea!, me lo apunto!
Fácil y muy útil, ya verás 😊. Gracias por pasarte Macarena!