Esta crema de calabacín es una de esas de siempre. De las que te sacan de un apuro cualquier día, y que es verdurita rica para los peques.
El truco para mí está en el triturado de la verdura y por supuesto, en la calidad y madurez del calabacín. Normalmente suelo hacer cantidad de un litro, y la dejo en la nevera, porque aguanta muy bien. Pero si veo que no va a ser posible tomarla, la congelo.